top of page

El valor de la vida humana en Cristo



Versión en video: https://youtu.be/15xYTj8dOZo


Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios. (1 Corintios 6:20)


Es fácil medir el valor de las cosas por su costo. El oro, las piedras preciosas y las obras de arte son altamente valorados por su rareza y el precio que alguien está dispuesto a pagar por ellos. Pero, ¿cómo medimos el valor de la vida humana?


Desde la creación, Dios imprimió en cada persona la imagen de su semejanza, dándole un valor incomparable (Génesis 1:27). Sin embargo, el pecado corrompió esa imagen, alejándonos de Él. Aun así, Dios no nos dejó en ese estado, Él demostró cuánto valemos al enviar a su Hijo, el Señor Jesús, a dar su vida por nosotros.


El precio pagado no fue oro ni plata, sino la sangre preciosa de Cristo (1 Pedro 1:18–19). Cada vida humana es tan valiosa que el autor de la vida mismo decidió entregarse en rescate. No hubo regateo ni descuento: nuestra redención costó el sacrificio supremo del Cordero de Dios. Por tanto, la vida del ser humano tiene un valor inconmensurable, esto es, la vida de aquel que es la vida (Juan 14:6).


Mis hermanos, cuando el enemigo susurra que no valemos nada, cuando el mundo nos mide por estándares temporales, recordemos que nuestro valor fue sellado en la cruz. Somos amados, redimidos y preciosos ante los ojos de Dios. Que esta verdad nos impulse a vivir para su gloria, reflejando su amor y proclamando el evangelio a otros, porque cada alma vale el precio más alto jamás pagado.

Commenti


bottom of page