Viviendo bajo la soberanía de Dios
- 7 abr
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Versión en video: https://youtu.be/2YNQ4mEq-mI
Nuestro Dios está en los cielos; todo lo que quiso ha hecho. (Salmos 115:3)
Vivir bajo la soberanía de Dios es reconocer que Él está en control absoluto de todas las cosas: lo visible y lo invisible, lo que entendemos y lo que no comprendemos. Nada escapa a su mirada ni a su propósito eterno. Esta verdad, lejos de causar temor, debe llenar nuestros corazones de paz. No estamos a la deriva en este mundo; estamos en las manos del soberano del universo.
Cuando los planes cambian, cuando el sufrimiento toca a nuestra puerta o cuando el futuro se vuelve incierto, podemos descansar en que Dios no ha perdido el control. Él no improvisa. Aun en medio del caos, su voluntad se cumple con perfección. La soberanía de Dios no significa que todo será fácil, sino que todo será usado para su gloria y para nuestro bien, conforme a su propósito (Romanos 8:28).
Aceptar la soberanía de Dios también nos llama a la humildad. No siempre entenderemos sus caminos, pero sí podemos confiar en su carácter. Él es justo, fiel, misericordioso y sabio. Nuestra tarea no es cuestionarlo, sino rendirnos a Él con fe y obediencia, sabiendo que nada ocurre fuera de su sabia providencia.
Entonces, ¿estoy viviendo como si Dios realmente tuviera el control de mi vida? ¿O sigo luchando por manejar mi vida con mis propias fuerzas?
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